Hernia Femoral

La hernia femoral es una hernia poco común, se estima que se presenta solo en un 5% de los casos.  Pero no por ser poco frecuente resulta difícil de tratar. Al contrario, hay una gran cantidad de tips y recomendaciones que puedes seguir para poder tratar una hernia femoral y llevar una vida normal.

Si lo que estás buscando es respuesta a todas esas dudas que pasan por tu cabeza con respecto a la hernia femoral sigue leyendo que este artículo está hecho  para ti.

¿Qué es una hernia femoral?

Una hernia femoral es un abultamiento generalmente de grasa o de intestino en la zona que se conoce como canal femoral y este se encuentra cerca de la ingle. Para que esto ocurra esta zona debe estar débil y así permite que ocurra la protrusión.

Esta hernia es más común en mujeres y en la mayoría de los casos puede presentarse con estrangulación.

¿Cuáles son las causas de una hernia femoral?

Hasta el día de hoy no existen causas claras por las que se comienza a desarrollar una hernia femoral, muchas de estas hernias pueden estar presentes desde el momento del nacimiento, es decir que son congénitas, pero no se manifiestan hasta la vida adulta.

Sin embargo hay ciertos factores que favorecen a la aparición de una hernia femoral, entre estos factores tenemos:

El estreñimiento. El realizar fuerza al momento de la evacuación ocasiona un debilitamiento en la zona femoral, facilitando así la aparición de una hernia.

El toser constantemente también puede ser una causa de aparición de una hernia femoral.

Levantar objetos pesados de una manera que no es la adecuada debilita la zona del abdomen, la ingle y la zona femoral.

El esfuerzo al orinar muchas veces por causa de una próstata agrandada es un factor que favorece el debilitamiento de los músculos y como consecuencia trae la aparición de una hernia.

¿Qué síntomas presenta una hernia femoral?

La gran mayoría de personas con hernia femoral aseguran no haber tenido ningún tipo de síntomas, pero el abultamiento en la zona es notorio.

Si estamos frente a una hernia estrangulada puede llegar a aparecer vómitos o nauseas, incluso un dolor fuerte y punzante.

En caso de una hernia estrangulada lo que se recomienda es la visita urgente al médico para que sea el quien busque una solución a estos síntomas.

¿Qué tipos de hernia femoral existen?

La hernia femoral podríamos clasificarla en:

Hernia reducible: Cuando hablamos de esta hernia, es la más sencilla de tratar, pues esta puede volver a la zona abdominal manualmente, tan solo empujando nuevamente a la cavidad abdominal, dando espacio a la recuperación de la abertura, esperando que esta pueda recuperarse sola.

Hernia irreducible: Esta no puede recuperarse con tan solo la ayuda manual.

Hernia irreducible estrangulada: Cuando hablamos de una hernia estrangulada nos referimos al momento en el que los intestinos que están herniados comienzan a torcerse. Esta es la más grave y necesita de intervención urgente.

Hernia irreducible incarcerada: Este tipo de hernia femoral también se considera una emergencia que necesita de intervención médica inmediata. Una hernia femoral incarcerada es cuando una parte del intestino se queda atrapado en la hernia ocasionando malestares y dolores.

¿Cómo se diagnostica una hernia femoral?

Para poder diagnosticar una hernia femoral el doctor deberá realizar un examen físico en el área para asegurarse que el abultamiento que se encuentra en la zona de la ingle es una hernia femoral.

Es muy común que en casos de pacientes con sobrepeso  el abultamiento no se pueda palpar bien por lo que se hace necesario realizar una resonancia magnética o imágenes de ultrasonido para poder confirmar la hernia.

¿Cuál es el tratamiento de una hernia femoral?

El tratamiento de hernia femoral más efectivo será siempre una cirugía. Pues a diferencia de otras hernias la hernia femoral tiene mayor probabilidad de desarrollar complicaciones. Lo que se busca con la cirugía es poder eliminar completamente la hernia para así descartar problemas más graves.

Una cirugía de hernia no garantiza que no pueda volver a parecer, pero se asegurara de que ya no existan molestias o temores de problemas más graves con el pasar del tiempo.

Por lo general para tratar una hernia femoral hay dos tipos de intervención, está la cirugía abierta y la laparoscopia.

La cirugía abierta es el tipo de intervención que todos conocemos, en la que se realiza una abertura en el área para así poder empujar la hernia a su lugar. En ocasiones el cirujano utiliza una malla quirúrgica para poder trabajar como una barrera y ayudar a los músculos de la zona a reforzarse.

Por otra parte la laparoscopia es una intervención menos invasiva pero cabe recalcar que también es más complicada. En este tipo de intervención se hacen varias incisiones de menos tamaño, para poder introducir en el cuerpo una cámara que ayudará la realización de la cirugía. Por las otras aberturas se introducen los instrumentos con los que se empujara la hernia a su lugar.

En el caso de la intervención por laparoscopia también es posible usar la malla quirúrgica.

Ambas recuperaciones son bastante rápidas, pero debemos mencionar que con la intervención por laparoscopia es mucho más rápida y cómoda.

¿Existen complicaciones por la operación?

Como mencionamos anteriormente la operación de hernia femoral es bastante común por lo que los riesgos de complicaciones son muy pocos. Pero como en toda cirugía existe una posibilidad de que algo no salga como se espera.

Una de las complicaciones más comunes es el de las infecciones, muchas veces la herida puede llegar a infectarse, pero esto no debe ser motivo de preocupación, pues generalmente con antibióticos que deberá recetarte el medico esta infección en poco tiempo desaparecerá.

El sangrado es una complicación que no solo se presenta en esta cirugía sino en muchas otras. En el caso de la hernia femoral es normal que se presente un poco de sangrado, afortunadamente con observación del médico es más que suficiente. Existes casos donde se deberá intervenir nuevamente, pero el porcentaje de estos casos es muy bajo.

El daño al nervio femoral es muy poco probable pero también existe el riego que ocurra.

¿Cuál es el tiempo de recuperación?

Afortunadamente la recuperación de una cirugía de este tipo es bastante rápida. Se recomienda mantenerse en reposo por lo menos de 10 a 15 días.

No se debe estar en cama durante todos estos días pero si se debe tener mucho más cuidado al realizar actividades normales.  Luego de esto el paciente podrá reincorporarse a sus actividades cotidianas.

El tipo de trabajo que realiza el paciente juega un papel muy importante, pues si es un trabajo de oficina que amerite estar mucho tiempo sentado puede ser dañino para la recuperación. Al igual para quienes realizan trabajos de fuerza, pues no se recomienda alzar objetos pesados por lo menos las primeras semanas.

Luego de pasadas unas semanas puede comenzar a levantar objetos más pesados pero nunca se debe abusar de esto y menos si no se están tomando las precauciones necesarias, como usar un cinturón que te ayude a la estabilidad.

¿Puede reaparecer una hernia femoral?

Si, luego de la reparación de una hernia existe la posibilidad de que reaparezca incluso años después.

Pero no es motivo de preocupación, pues siempre podrá realizarse una segunda intervención, por supuesto que lo recomendable es que luego de la primera se tomen todos los cuidados necesarios para evitar esta reaparición.

¿Existe alguna dieta que deba seguir  para la hernia femoral?

Hasta ahora no hay una dieta específicamente dedicada a la hernia femoral. Sin embargo hay ciertas recomendaciones a nivel de alimentación que deben seguirse para evitar complicaciones y en otros casos ayudar a la recuperación.

Aunque no lo creas, una buena alimentación ayuda muchísimo a la cicatrización y recuperación luego de una intervención.

Una de las primeras recomendaciones es beber mucha agua, esto será de gran beneficio a la hora del postoperatorio, pues mantener tu cuerpo hidratado ayuda muchísimo no solo a la recuperación si no a muchísimas partes de tu cuerpo.

Evitar el sobrepeso es lo más recomendable en estos casos, para esto se recomienda comer porciones pequeñas y evitar las comidas basura que no aportan nutrientes a nuestro cuerpo.

El estreñimiento es uno de los primeros causantes de hernia, por eso para evitar el estreñimiento lo recomendable es comenzar una dieta que incluya fibra en todas las comidas, para así ayudar al cuerpo a la hora de la digestión.

Para no equivocarte en cuanto a los alimentos que puedes y no puedes consumir lo que se recomienda es visitar a un dietista, que podrá realizar una dieta que se adapte a ti y a tu cuerpo. Pues como sabemos no todos los cuerpos trabajan ni reaccionan de la misma forma.

Como una última recomendación está evitar por completo las bebidas alcohólicas y el cigarrillo. El consumir estas sustancias puede crear un debilitamiento en muchas zonas del abdomen lo cual te hace más propenso a desarrollar una hernia. Sin mencionar  los problemas pulmonares que causa.

¿Es lo mismo una hernia inguinal que una femoral?

Es muy común que se lleguen a confundir, pues ambas están ubicadas cerca de la ingle.  Pero debemos tomar en cuenta su ubicación exacta, pues esto no ayudara a determinar si es una hernia inguinal o una femoral.

Cuando el abultamiento inusual se encuentra por encima del ligamento inguinal, estamos frente a una hernia inguinal.

Ahora bien, cuando por el contrario la hernia está ubicada debajo del ligamento, entonces nos encontramos con una hernia femoral.

Para que no existan confusiones a la hora del diagnóstico, lo que se recomienda es visitar a un médico especializado que realice el estudio detenidamente y pueda determinar de manera correcta el tipo de hernia que padeces y así pueda tratarse correctamente.

¿Qué ejercicios puedo realizar luego de una cirugía de hernia femoral?

Como mencionamos anteriormente se debe mantener un reposo de por lo menos 15 días para poder comenzar a realizar sus actividades normales. Ahora bien el ejercicio aunque no lo parezca puede ser de gran ayuda si se realiza con precaución.

El principal ejercicio que puede realizar alguien que ha sido operado de hernia femoral es caminar. Puede comenzar caminando distancias cortas unos minutos al día. Esto ayudará a mantener activo tu cuerpo y tu mente.

Pasados unos meses puedes realizar también ejercicios en el gimnasio que requieran el levantar pesas, sin exceder tu límite y tomando siempre las precauciones necesarias.

Para quienes quieren comenzar el gimnasio luego de la operación se recomienda hablar con un entrenador, para que sea él quien arme tus rutinas de ejercicio tomando en cuenta tu condición. Él sabrá que ejercicios son más beneficiosos para ti y cuales debes evitar para no tener complicaciones.

Y por último, los ejercicios de yoga también son de gran ayuda, pues mantienen tu cuerpo activo y tu mente tranquila, lo cual resulta muy beneficioso a la hora de una recuperación.

¿Resulta un riesgo la hernia femoral en el embarazo?

No, no es así. Claro que al mantener un embarazo el cuerpo no está acostumbrado a este peso inusual, pero con reposo y cuidados podrás llevar un embarazo normal.

Puede que la hernia represente un problema a la hora del parto, pues requiere de un sobreesfuerzo para poder realizarse.  Esto deberá comentarse con el especialista que determinara que tan seguro es un parto natural.

En caso de que esto represente un riesgo mayor, se recomienda realizar una cesárea  para evitar problemas.  Pero el feto no estará afectado por esta hernia.

 

La hernia femoral a pesar de ser poco frecuente es muy fácil de tratar. Tomando las precauciones necesarias, visitando al médico y siguiendo nuestros consejos, podrás llevar una vida tranquila sin ninguna complicación. Recuerda que antes cualquier síntoma deberás ir con un especialista que estudie tu caso para poder tratar tu hernia lo antes posible.

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